CAF Tenerife aboga por una normativa autonómica que prime la conservación de los edificios

Los administradores de fincas colegiados creen que se confunde la ley estatal con la ordenanza municipal de la ITE, que debe ser simplificada y obligar al mantenimiento gradual de los inmuebles.

Santa Cruz de Tenerife, 10 de noviembre de 2015. “El Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife está confundiendo la Ley estatal con lo que es una ordenanza municipal que debe ser más simple en su ejecución y exigir el mantenimiento de los edificios de manera gradual”, advierten los administradores de fincas colegiados ante el anuncio de una nueva regulación de la Inspección Técnica de los Edificios en la capital tinerfeña.

En opinión de los profesionales tinerfeños, la ITE es una exigencia que se debe hacer cumplir, “puesto que no hay cultura de mantenimiento y porque el deber de conservación y el deber de restauración y rehabilitación está dentro de las obligaciones del titular de la edificación”. A estos efectos es necesario que los actores sociales implicados en este marco de conservación procuren una mayor información hacia los obligados a mantener, restaurar o rehabilitar ayudando a que no se confunda esta obligación que nace de la propia Constitución Española con un impuesto más, promoviendo una mayor conciencia entre los ciudadanos en la conservación de sus edificaciones y, por tanto, del entorno urbano.

Evaluaciones periódicas de los inmuebles

En este sentido, el Colegio Territorial de Administradores de Fincas de Santa Cruz de Tenerife defiende y explica que lo conveniente para los edificios y para el propio urbanismo de la ciudad sería que a partir de los diez años, tiempo en que finaliza la cobertura de seguro decenal, se hiciera la primera evaluación del inmueble, precisamente para verificar que no hay nada que reclamar a la empresa constructora y técnicos intervinientes en la edificación. A partir de esa fecha, la segunda revisión del edificio podría hacerse a los 15 años y así sucesivamente, de manera gradual y constante en períodos de cinco años, de forma que en cada revisión se evalúen determinados elementos edificatorios, estructurales o no, cuya corrección, en su caso, no representa un coste tan elevado como el de una revisión cada cincuenta años.

A juicio de los administradores de fincas colegiados, la solución para una mejor conservación de los edificios en todos los municipios debería ser una norma autonómica, con una filosofía distinta a la de la ley nacional que obliga “in extremis” a la inspección y reparación transcurridos 50 años de vida del inmueble, y teniendo en cuenta que el mantenimiento exige inversiones más pequeñas que una rehabilitación del edificio ya deteriorado.

No obstante, y ante el anuncio del concejal de Urbanismo capitalino, Carlos Garcinuño, de acometer cambios en la normativa de las ITE de Santa Cruz, los administradores de fincas colegiados le reiteran su disposición a colaborar y a hacer sus aportaciones para la mejor regulación de esta cuestión, en interés de los propietarios, de las edificaciones y de la ciudad.



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